Todo el mundo quiere una campaña. Se supone que si se define una campaña eres capaz de saber cómo ha funcionado la promoción del servicio o producto en internet. Una campaña consiste en definir un atributo distinto para cada ubicación (uno por link asociado) y la conversión asociada a dicha promoción (alta en un servicio, compra de producto o simplemente llegar a una determinada página). La tasa de éxito del número de conversiones entre el número de respuestas a los distintos links determina el éxito o fracaso de cada campaña. Si se define la campaña sabremos cuantos usuarios se han interesado en cada anuncio de la promoción y cuantas conversiones ha conseguido cada una de las ubicaciones.
Sin embargo, definir una campaña no es lo adecuado si lo que se quiere medir es el éxito de un proceso. Lo que hace falta entonces es un embudo. Definir un embudo consiste en determinar un nivel para cada página o grupo de páginas que forma parte de dicho proceso, tantos niveles como pasos, como mínimo 3. De esta forma seremos capaces de saber cuantos usuarios pasan de un paso a otro (y qué porcentaje se cae en cada nivel), además de saber cuantos usuarios se han interesado en la campaña y cuantas conversiones se han logrado, aunque en este caso no podremos diferenciar las ubicaciones, pero un embudo resulta muy útil para analizar qué pasos sigue un usuario en un determinado proceso.
No hace falta tener un embudo definido para saber los puntos fuertes o débiles de un proceso sencillo, ya que se puede construir a través del número de visitas que posee cada página del proceso en un determinado periodo.
Con HBX además es posible analizar las páginas que visitan los usuarios desde una página inicial y hasta una página final, así como saber las páginas por las que navega un usuario y en qué orden. Pero mi experiencia me dice que estas métricas no son del todo de fiar ya que hay tantas combinaciones que se pueden realizar que no he encontrado aún ningun path o camino seguido que hayan realizado más del 15% de los usuarios y sobre esa base no me atrevo a tomar decisiones.
Con frecuencia, los usuarios no siguen la navegación que o bien esperamos o bien queremos que hagan, por lo que estos diferentes estudios pueden servirnos para reestructurar la navegación o rediseñar una determinada página que no sea útil.
Lo importante es conocer las diferentes opciones y según lo que se quiera medir o saber generar una campaña, un embudo o simplemente investigar rutas que hayan seguido usuarios que se han interesado por el producto o servicio.
No será por cosas que medir 🙂
Deja un comentario